miércoles, 17 de noviembre de 2010

Meteoritos - Campo del Cielo


ZONA METEORICA CAMPO DEL CIELO - GANCEDO PROVINCIA DEL CHACO
La memoria nos habla del suceso de Campo del Cielo ya desde mucho antes del amanecer de la historia escrita de nuestra región. Perdidos en el tiempo nos llegan relatos, mitos, leyendas aborígenes pasadas de generación a generación, sagrados peregrinares con el objeto de rendir culto a aquel trozo de hierro caído del cielo (árbol de fuego para ellos) que materializaba a su Dios en esta, su tierra.
Ellos, los milenarios pobladores de esta zona y sus alrededores nos legaron la relación. Algo de proporciones inmensas había ocurrido entre el cielo y estas tierras.
Gracias a esta tradición y a la incontrolable sed de bienes para la corona, a solo 84 años del descubrimiento de América las primeras expediciones militares dieron origen a la historia escrita de Campo del Cielo

Año: 1576 - Expedición de Hernán Mexía de Miraval:
 Relatos de los aborígenes del lugar acerca de una gran masa metálica  vista en los campos (ya considerada como una piedra caída del cielo), hicieron que el Gobernador de las Provincias del Tucumán, Capitán General don Gonzalo Abreu y Figueroa ordenara al Capitán de Campo Mexía de Miraval su localización. Este realizó la expedición acompañado de 8 soldados, junto a los cuales, en su camino al “minero de hierro” tubo que luchar contra indios Chiriguanos, que según sus relatos consumían carne humana. Luego de un largo recorrido hallan un gran “peñol de hierro” (saliente) del cual tomaron algunos fragmentos

Año: 1774 y 1776 Expediciones de Bartolomé Francisco de Maguna:
Este expedicionario realizó dos entradas en busca de la “mina de plata” que se comentaba existía en el chaco. En 1774 partió con un grupo de hombres, y a unas 90 leguas de Santiago encontró un planchón de metal (es muy probable que de esta expedición surgiera el conocido nombre de Mesón de Fierro), al que estimó unos 23000 Kg.   Del cual extrajo muestras. Los exámenes de maestros herreros acerca de que  se trataba de plata despertaron gran interés, lo cual motivó que dos años más tarde, por orden del Virrey de Perú y Chile, Maguna regresara al Chaco para recoger más muestras. La  ambiciosa ilusión de la mina de plata quedo desterrada en 1778 cuando don Francisco de Serra y Canals determinó que no se trataba de plata, sino de "fierro de muy particular calidad".

Año: 1779 - Expedición de Francisco de Ibarra:
El Virrey de Buenos Aires, Pedro de Cevallos, encomendó al Sargento Mayor Francisco de Ibarra la organización de una expedición al “Mesón de Fierro” con el objeto de traer todo el hierro que fuera posible. El grupo formado por veinticinco hombres partió de Matará el 20 de julio de 1779. Seis días más tarde y luego de haber recorrido unos 340 Kilómetros llegaban al “fierro”. El Capitán  Melchor Miguel Costas fue el encargado de la medición del meteorito, la que arrojó 3,52m de largo, 1.85m de ancho y un espesor que variaba según donde se tomara la medición entre 0,8m y 1,36m. A fuerza de 15 cinceles inutilizados logró extraer 2,7 Kg. de hierro de la masa principal.
Esta incursión fue sin lugar a dudas la que mas datos aportó sobre la situación geográfica del famoso meteorito gracias al muy completo diario de expedición llevado por el Capitán Costas, el cual contiene detalles de parajes, distancias y accidentes geográficos del recorrido.

Año: 1783 - Expedición de Miguel Rubín de Célis:
A pesar de conocer los últimos análisis que desmentían la idea de un yacimiento de plata, el Virrey Vértiz cedió ante las continuas denuncias que hablaban de su existencia y solicitó al Teniente de Fragata Miguel Rubín de Célis efectuar una expedición científica al “mesón de fierro”.
Junto a el, partieron como oficiales científicos el Ingeniero Pedro Antonio Cerviño, el Coronel Francisco Gavino Arias y doscientos hombres como expedicionarios. Luego de recorrer 330Km llegaron a la masa metálica, allí realizaron exámenes metalúrgicos y calcularon nuevamente su peso y medidas. Excavaron a su alrededor y determinaron que se trataba de una masa aislada.
A ésta expedición se debe la desaparición del Mesón de Fierro, debido a las explosiones que realizaron en la base donde se apoyaba el mismo luego de las excavaciones. El meteorito quedo sepultado a muy poca profundidad, pero nada se sabe de el desde hace 221 años. Quizás el dato mas relevante que aporto el experimentado navegante, fue la determinación de latitud en el punto donde se encontraba el meteorito, en 27º 28 Sur.

Año: 1803 – Expedición de Diego Bravo de Rueda:
En una de sus tantas incursiones contra los indios, el Teniente Coronel y Jefe de Frontera de Santiago del Estero Bravo de Rueda obtuvo datos precisos sobre la ubicación del meteorito en el Chaco. Basándose en esta información organizó junto a Miguel Jerónimo Castellanos y Fernando Rojas una expedición al “Mesón de Fierro”.
Respecto del "Mesón de Fierro" la búsqueda fue infructuosa. Pero luego de recorrer 442Km, cerca de un paraje conocido como Runa Pocito hallaron un trozo metálico de unos mil kilos. Este meteorito terminaría  en Inglaterra y llevaría el nombre del paraje donde se lo encontró.

Año: 1804 – Expedición de Fernando Rojas:
Se tiene muy poca información sobre los detalles esta expedición, pero Fernando Rojas junto a doce peones fueron guiados por un vaqueano hasta el probable sitio del “mesón de fierro”. Según las narraciones, finalmente el guía los condujo a otro sitio donde existía un bloque de hierro similar a un gran tronco de quebracho del cual tomaron muestras.

Año: 1870 a 1872 – Coronel Manuel Obligado
Año: 1873 –  Coronel Napoleón Uriburu
Año: 1875 a 1879 – Coronel Manuel Obligado
Año: 1880 – Coronel Luis Jorge Fontana
Año: 1881 – Coronel Juan Sola
Año: 1883 – General Francisco Bosh
Año: 1884 – General Benjamín Victorica

Estas expediciones militares tenían como objetivo principal la conquista y dominio de estos territorios, pero también recibieron órdenes del gobierno nacional de descubrir el meteorito perdido si ello era posible.

Ninguna de estas logro volver a encontrar al famoso “Mesón de Fierro”

Año: 1913 – Manuel Santillán Suárez:
Realizó varias incursiones desde 1902 motivado por la obsesión de encontrar el “Mesón de Fierro”. En diciembre de 1913 halló a unos 15Km al sur de la estación Gancedo tres lagunas muy cercanas unas de otras. En la mas grande de ellas encontró varios fragmentos metálicos (el mayor tenia aprox. 2000Kg) Estas lagunas terminarían siendo, según estudios posteriores, cráteres de impacto.

Año: 1923 – Dr. Juan José Nágera:
Cuando fue designado por la Nación para realizar una investigación sobre los fragmentos hallados en Campo del Cielo, el geólogo Juan José Nágera se desempeñaba como Jefe de la Sección geología de la Dirección General de Minas e Hidrología. Cinco días del mes de mayo de 1923 se dedico al estudio de los hoyos hallados por Santillán Suárez años atrás. Lo mas particular de esta expedición fueron sin dudas sus conclusiones. A pesar de que Nágera realizó un minucioso estudio de los hoyos, incluyendo la estratigrafía y habiendo hallado fragmentos que (el mismo encargo su análisis) resultaron ser meteoritos, concluyó que las depresiones habían sido hechas por los aborígenes que poblaron la zona en época prehispánica y que era erróneo asociarlas a la caída de meteoritos. Igualmente su investigación aportó por primera vez datos científicos sobre el fenómeno.

Año 1923:
El leñador Manuel Costilla descubre  en  campo “El Rosario” (Santiago del Estero) un  meteorito de 4210 Kg. Este sería bautizado luego con el nombre de “El Toba”

Año 1924:
Un labriego cuyo nombre se desconoce, halla un meteorito de 2,5Kg en el pueblo Gancedo. Sería bautizado con el nombre de “El Hacha”

Año 1925:
El hachero Arturo Medina halla en el Lote 89 de la Colonia San Luis (provincia del Chaco) un meteorito de 732 Kg., se conocería luego como “El Mocoví”
Año 1931: Se descubre el meteorito “Tonocote”, de 850Kg

Año 1936: Se descubre el meteorito “Abipón”, de 460Kg

Año 1937: Se descubre el meteorito “Mataco”, de 990Kg

Año: 1962: El vaqueano Lázaro Melovich halla en Campo El Rosario (Santiago del Estero) un meteorito de 1998Kg se le dio el nombre de “El Taco”

Años: 1962 al 1972 - Dr. William A. Cassidy:
Representando primero a la Universidad de Columbia y luego al Departamento de la Tierra y Ciencias Planetarias de la Universidad de Pittsburg, el geólogo William Cassidy junto a un equipo de científicos estadounidenses, acompañados por la geóloga argentina Dra. L. M. Villar, y Argentino F. Romaña del Departamento de Geografía de la Universidad Nacional del Nordeste, realizó varias expediciones a la zona. Durante varios años de investigación minuciosa y metódica, 16 cráteres fueron agregados a los 4 ya estudiados por Nágera a principios de siglo. Por primera vez, se utilizaron magnetómetros, detectores de metales y equipos para extracción de muestras estratigráficas. En su última publicación sobre Campo del Cielo (Abril de 1996), Cassidy apoyado en los más recientes hallazgos sobre cálculo de impacto y trayectorias, aportó datos muy interesantes sobre el fenómeno.

Años: 1986 al Presente:
La Asoc. Chaqueña de Astronomía, formada por geólogos y técnicos en varias áreas, realizó varias incursiones con apoyo privado y del Estado a la Zona de dispersión. Seis cráteres nuevos fueron estudiados e incorporados a la lista de los ya conocidos. Mediante el uso de la teledetección satelital y aérea se han detectado mas de una decena de posibles cráteres de impacto que esperan su estudio. La adquisición reciente de un gradiómetro portátil facilitará notablemente el relevamiento de los posibles impactos.



Amigos, durante mi visita en Agosto 2008 a Campo del Cielo, me pude sacar unas fotos junto al meteorito "El Adolfo" - en honor a la memoria del geólogo Adolfo Gustín, quien trabajó durante un tiempo con la misión científica en el terreno de Campo del Cielo- allí pueden ver la posición en que fué encontrado y las trincheras que se cavaron para extraerlo.




Pisando sobre el meteorito ubicado en su lugar original

Trincheras escabadas a pala (para seguir trayectoria de caída del meteorito)

Restos meteóricos desprendidos al eslingarlo para su extracción con la grua

"El Adolfo" antes de ser extraido para ser llevado a la
Reserva Meteórica de Campo del Cielo
APOYAMOS DESDE ESTE BLOGS, A LA CREACION DE UNA ZONA PROTEGIDA PARA QUE SE CONTINUEN LOS ESTUDIOS Y EXTRACCION DE LOS DEMAS METEORITOS ENTERRADOS EN LA ZONA DE IMPACTO.

5 comentarios:

  1. Gracias por el material, es muy bueno para consulta de los aficionados por el universo

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  2. Por fin algo relacionado con astronomia chaqueña. fuerza amigos

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  3. Me encanta, hace unos años busque información sobre los meteoritos de Campo de Cielo y solo encontré un estudio realizado por una santafesina, muy interesante por cierto, pero me enorgullece que desde el chaco surja esta iniciativa.

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  4. encontre un fragmento muy parecido al meteorito..de unos 500 gramos..me gustaria saber si es o no, como hago...maricartirol@yahoo.com.ar

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    Respuestas
    1. Hay varias características físicas que determinansi esun meteorito
      1) es un trozo de metal muy pesado (de mucha densidad) no tiene bordes filosos sinó que es redondeado.
      2) no es liso sinó que tiene irregularidades parecidas a un cráter en varias partes de su superficie (esto se debe al burbujeo - 2.000 ºC - cuando ingresó a la atmósfera terrestre.
      3) si es la corteza del meteorito no parece un metal sinó que tiene un color marron clarito ello se debe al depósito de tierra arcillosa que se le adhiere a la masa metálica cuando toca tierra.
      4) la mejor prueba será indudablemente el ensayo de laboratorio que puede hacer la UNNE.
      Espero haber respuesto tu inquietud.
      Gracias.
      César Cotichelli

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